
La DIC de Mossos d’Esquadra ha conseguido identificar el cuerpo que se halló el pasado 24 de noviembre en aguas del pantano de Boadella, en el Alt Empordà gerundense. Se trata de Vasili Korchagin, un súbdito ruso de 55 años, cuya desaparición se denunció en Llinars del Vallès, en la provincia de Barcelona. El cuerpo se encontraba flotando en el agua con una cuerda atada al cuello y los pies, de los que pendían unas piedras que tendrían la intención de provocar el hundimiento del cadáver, que finalmente apareció semihundido.
Los múltiples golpes que presentaba en el cuerpo dieron a los investigadores una lectura clara: que había muerto como consecuencia de una paliza y el hecho de que en sus pulmones no hubiese agua indicaba que fue lanzado al pantano una vez muerto. Al igual que el doble crimen de Susqueda, al lugar donde se encontró el cuerpo de Vasili Korchagin se llega por caminos tortuosos que desembocan en el agua del pantano. Los Mossos d’Esquadra investigan las circunstancias que rodeaban la vida de Korchagin, así como los indicios que pueden encontrarse a través de la autopsia y la localización geográfica del cuerpo que da a entender que quienes lo dejaron en el pantano conocían la zona.