M. Peñalver
La muerte del marido de la propietaria de la peluquería Spejo’s del barrio de Sarrià-Sant Gervasi de Barcelona ayer noche no está clara. Los investigadores no han descartado ninguna hipótesis, aunque la inicial fuese la de un robo con intimidación. Si bien existen elementos que pueden llevar a pensar en el atraco, como puede ser la hora en que se cierra el establecimiento o se hace la recaudación, también sorprende que el autor de los cinco disparos no se apropiase de la citada recaudación, según afirma La Vanguardia.
Quizás sorprenda también la contundencia del ataque, ya que es poco habitual que quien perpetra un robo con intimidación o violencia dispare mortalmente y después actúe. Los testigos vieron huir a un hombre joven, delgado y con el cabello corto, que cubría su cara y llevaba guantes. El fallecido, de 47 años y vecino del Maresme, que también -según el citado rotativo- es propietario de una empresa. La huida del homicida sin llevarse el dinero puede también interpretarse como una reacción espontánea al comprobar que sus disparos habían acabado con la vida de una persona. Quizás en sus planteamientos iniciales no se encontraba tener que utilizar el arma. Lo que sí es cierto es que la forma de actuar: disparar mortalmente en los primeros segundos del acto delictivo tiene más relación con otro tipo de delitos contra las personas que no los relacionados con la propiedad.
La División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos d’Esquadra de Barcelona, por tanto, no descarta ningun móvil y por ello investiga el entorno de la víctima, como es habitual en casos como el que ha llegado a su departamento. El análisis de las cámaras de seguridad, tanto del establecimiento como de otros de la zona, acompañado de los testimonios, la balística y otros indicios llevarán probablemente en los próximos días a la detención del supuesto atracador.
Matan a un hombre a tiros en una peluquería del barrio de Sarrià-Sant Gervasi, en Barcelona
